lunes, 20 de junio de 2016

Feng Shui

El Feng Shui es un arte milenario que intenta conjugar la armonía del ser humano con el entorno arquitectónico que lo rodea. Esta práctica oriental tiene como objetivo aumentar y mejorar nuestra calidad de vida.
El Feng Shui nació en las llanuras agrícolas de la antigua China hace 5.000 años. La traducción literal del término es Viento-Agua. Por este motivo, los chinos argumentan que este arte es como el viento, que no se puede entender, y como el agua, que no se puede agarrar. Se fundamenta en las teorías del pensamiento máximo chino, el I Ching, las leyes del Yin Yang y los cinco elementos vitales de esta cultura oriental.
Para conseguir alcanzar el Feng Shui, que es el equilibrio del ser humano con su entorno, se busca conjugar los elementos de construcción, las formas, los colores,  formas, objetos y la decoración para conseguir un equilibrio entre el tiempo, el espacio de las personas .
Así pues, si el lugar donde vivimos posee un buen Feng Shui, se cree que nuestra vida será mucho más dichosa en todos los aspectos. Estas creencias pueden ser aplicadas tanto en las viviendas como en los lugares de trabajo.
La cultura china parte de la idea de que todo cambia y evoluciona y que nunca se está estancado en el tiempo. Los médicos chinos creen que cuando una persona enferma, se debe a alguna cuestión o problema que hay en la vida de esa persona o en su interior. Con estas creencias, que rebaten y cuestionan todos los principios empíricos de la medicina, se comprende que este arte se crea capaz de conseguir más armonía y estabilidad en la vida de las personas.
Cada vez que nace una persona según cree la cultura china, se produce un desplazamiento energético creado por la posición de los astros, que incide directamente en la vida de ese individuo. Las energías están relacionadas con los lugares donde vivimos y cómo vivimos. Por tanto, el Feng Shui puede ayudar a conseguir que las personas recuperen y armonicen todas sus fuerzas y energías en un espacio adecuado.
La persona reflejada en su propia vida
El lugar que el hombre ocupa en el mundo tiene que ver con la relación dinámica entre sus energías personales y las energías que moldean el medio ambiente y la naturaleza que nos rodea. Las acciones de los hombres tienen que estar encaminadas a conseguir este equilibrio entre hombre y naturaleza.
Sin embargo, esta práctica no ha de concebirse como la panacea a los problemas de los seres humanos, porque no es ninguna práctica milagrosa ni la única solución. Pero si sabemos manejar los conceptos de manera adecuada, podremos conseguir un cambio de rumbo en nuestra vida.
En la actualidad, el Feng Shui se practica en todo el mundo, con un mayor desarrollo en Hong Kong, Malasia, Singapur y Taiwán. Últimamente, Europa, Estados Unidos y México están acogiendo esta práctica como algo diferente y alternativo a lo que ofrece la vida materialista y consumista de la cultura occidental. Hay que mencionar que México esta haciendo un aporte extraordinario en la difusión del feng shui Clásico.
Otro aspecto a tener en cuenta es el concepto de los cinco elementos. Esta idea se utiliza en todas las filosofías chinas y también en el Feng Shui. Estos elementos: madera,  agua,  fuego,  tierra y el metal, se combinan en tres ciclos, uno constructivo, otro destructivo y el de control. Por ejemplo, en el destructivo, el agua destruye al fuego, que funde el metal, y este a su vez, corta la madera que agota la tierra y absorbe el agua.
La relación de estos cinco elementos influye en la cultura china y en la disposición de los elementos dentro del hábitat, siguiendo las técnicas del Feng Shui.

Malú Grajales V®

FSTM.

No hay comentarios:

Publicar un comentario